Pura lengua, notas sueltas
La lengua y el crerebro
EL Relativismo lingüístico, es un enfoque científico que alcanzó a constituirse en escuela en el siglo xx (Sapir, Whorf). Su hipótesis de trabajo es que la lengua materna impacta decididamente la mente y la personalidad de los hablantes, de manera que los trobiandeses ( habitantes de Nueva Guinea), quienes todavía no conectan la sexualidad con el embarazo, porque piensan que este se produce por mandato divino, y además asumen que la mujer tiene mayores fortalezas que el hombre para el trabajo físico ( por ello se dedican a la caza y a la pesca , mientras sus parejas masculinas, realizan las labores del hogar), tendrían una cosmovisión y quizás una estructura cerebral distinta de la de los colombianos, quienes estamos convencidos de que matarnos entre sí, pararnos sobre los demás para triunfar ( sobre-vivir, vivir sobre los otros) es el camino correcto.
La lengua y los usos preposicionales
Realmente el uso de las preposiciones es (tanto en la comunicación cotidiana, como en los textos académicos) un asunto que ha pasado de conflictivo a perverso. Ya nadie monta en bicicleta, ni vive cerca de la universidad. Ahora se prefiere montar bicicleta y vivir cerca a la universidad. Así que este no es un "texto a discutir", sino para discutir.

La lengua y la escritura en la escuela
ASÍ ESCRIBIMOS, ASÍ PENSAMOS Y ASÍ VIVIMOS. Nos rajamos en escritura y esto no es un asunto menor: escribir es una actividad comunicativa humana, esencialmente intelectual. Está ligada como ninguna otra a la vida inteligente, al pensamiento fluido, flexible y creador. Además de los vacíos formales que el artículo destaca (esos sí de menor importancia y de más sencilla corrección ),los colombianos letrados, los que fuimos "alfabetizados" en centros académicos obsesionados por las formas y más apegados a las cifras que a las letras, producimos textos rígidos, nublados, con escasa fuerza argumental y creadora; débilmente estructurados, colmados de repeticiones, arritmías, incoherencias y estereotipos.
Así escribimos, así pensamos y así vivimos.